2012-04-04

Lo que se habló en el taller de libros electrónicos

La semana pasada organizamos una charla-taller en la que tratamos de ofrecer un poco más de información sobre los libros electrónicos e intentamos solventar algunas de las dudas que nos habéis expuesto en los mostradores.

pella, paellita, paellera... cc-by (2.5) Montaraz

Una de las más importantes: el nombre. Para confundiros aún más, os compararemos los ebooks con las paellas.

En un principio, la paella era (es) el recipiente en el que se cocinaba el arroz, pero al final, ha terminado dándole el nombre al plato. Bueno, pues con los ebook ha pasado al revés. Por una parte tenemos los libros electrónicos (ebook) que son los archivos digitales y por otra tenemos los lectores de esos libros electrónicos (ereader) que son los aparatos.

En la charla hablamos de ambos (los aparatos y los libros, no las paellas) y terminamos comentando un poco las características del modelo de lector que prestamos en la biblioteca (el Papyre 613).

En la primera parte se habló de los lectores de libros electrónicos. Cómo funciona la tinta electrónica (lo tenéis muy bien explicado en esta infografía de Consumer) y en lo que tendríais que fijaros si estuvieráis interesados en adquirir uno (el tipo de pantalla, la conectividad, el precio...) se comentó incluso que si lo que queríais era leer en Internet, sería preferible decantarse por una tableta antes que un ereader. Viendo cómo está el patio (el mismo día de la charla se anunció que Amazon lanzaba el Kindle Touch) nuestra recomendación sería que el tope de dinero no sobrepasara del que marcara el nuevo modelo de Sony.
ePub logoa
En la segunda parte de la charla pasamos a hablar de los libros electrónicos (ebooks, propiamente dicho) que pueden presentarse en varios formatos. Aquí ya es donde empezó a complicarse la cosa, porque los libros electrónicos pueden aparecer de diferentes formas y no todas pueden estar soportadas en los aparatos que utilicéis (mirad lo que dicen en este artículo de El País).

Los formatos más importantes son los que permiten que los libros se ajusten a la pantalla del aparato que utilicemos, esto es, que podamos ampliar (o reducir) el tamaño de la letra y que no se descoloque el texto. El nombre del formato se conoce por las siglas que aparecen después del punto (es lo que se denomina como 'terminación del archvo') y el más importante, el que más nos conviene a los lectores por tratarse de el formato en código abierto que se pretende convertir en estándar es: ePub. Los lectores de Kindle (que alguno hubo en la charla) tienen su propio formato (azw) y no soportan el ePub. Su equivalente vendrían a ser los archivos .mobi.

¿Y si tenemos los documentos en otro formato? Pongamos por ejemplo que los archivos que queremos leer terminan en '.pdf', '.doc' (.odt) o '.txt', por hablar de los formatos más comunes. La mayoría de los lectores electrónicos aceptan estos formatos, pero lo más probable sería que perdiéramos facilidad de lectura. Por poner un ejemplo, si lees un documento en pdf en el lector, puedes ampliar la imagen pero sería como si le pusieras una lupa que tendrías que ir moviendo a lo ancho y largo del dCalibre programako logoaocumento para poder leerlo bien. Se impone la conversión de formatos.

Llegados a este punto... la ferviente recomendación de que instaléis Calibre, un programa de código abierto tan polivalente y funcional en la conversión y gestión de bibliotecas digitales que merece un post aparte en este mismo blog. De todas formas, para l@s reticentes a instalarse nada en el ordenador os indicamos otras herramientas que trabajan en línea como ePub2go o 2ePub y la extensión de writer2ePub que se puede añadir al paquete de ofimática openoffice/libreoffice.

Antes de la explicación del funcionamiento de los lectores de libros electrónicos de la biblioteca (somera explicación, porque casi todo el público había tenido la ocasión de trastear con los lectores que se prestan en la biblio) los dos últimos puntos de los que tratamos en este bloque fueron cómo conseguir los libros electrónicos y cómo compartir nuestros gustos y ampliarlos en esta nueva época de la lectura.Gutenberg proiektuko logoa

En cuanto al primer punto, precisamos que todas las obras contenidas en los dispositivos que prestamos se encuentran en situación de dominio público y que podéis acceder a las mismas desde sitios como el Proyecto Gutenberg, Open Library o Klasikoen Gordailua. Y en lo que respecta a 'sociabilización' de la lectura apuntamos algunos sitios como LibraryThing, Entrelectores o 111 Akademia (por no hablar del foro de la biblioteca) que permiten compartir lecturas y conocimientos entre sus usuari@s.

Para más información sobre este tema, os remitimos a textos más completos como el de Verónica Juárez o el de Amaia Garcia.

Bueno, pues de momento nada más, os dejamos con la presentación de la charla y con la promesa de seguir profundizando en este tema.









Irudia:Pella, paellita, paellera... (cc-by Montaraz)